La Generalitat Valenciana ha decidido mantener el nivel 2 de emergencia mientras la cifra de víctimas fatales por la DANA superan ya los doscientos. Carlos Mazón, presidente de la Generalitat, aún no ha elevado el estado a una situación de "emergencia catastrófica", lo que implicaría un cambio significativo en la gestión de la operación de emergencia.

Según la ley de Protección Civil y Gestión de Emergencias de la Generalitat, es necesario que se active el artículo 116 de la Constitución para solicitar un estado de alarma, algo que no ha sucedido hasta el momento. Esto implica que, en caso de que la situación se considere extremadamente grave, el presidente podría declarar la emergencia catastrófica.

Si Mazón eleva el nivel de emergencia a 3, asumiría la responsabilidad legal de las decisiones tomadas para mitigar los efectos de la DANA. Sin embargo, al no producirse esta elevación, la responsabilidad recae en el conseller competente en materia de protección civil, que actualmente es Salomé Prada, consejera de Justicia e Interior.

Al no declarar el estado de alarma, la Generalitat sigue al mando de la gestión de los recursos necesarios para combatir la DANA. El Gobierno central, por su parte, ha anunciado su intención de ofrecer respaldo mediante la disponibilidad de recursos materiales, económicos y humanos.

Esta mañana, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comunicado que se ampliará la presencia del Ejército, la Policía y la Guardia Civil en la Comunidad Valenciana. Esta medida responde a la solicitud de Mazón para el envío de 5000 efectivos militares a Valencia.

La Generalitat Valenciana sigue sin saber como actuar ante una situación de emergencia de tal magnitud.