El arqueólogo y youtuber PutoMikel ha manifestado su descontento en redes sociales tras que el partido Vox lo mencionara en el Congreso. Las palabras del diputado de extrema derecha Joaquín Robles López, quien afirmó de manera ofensiva que "los niños no sabrán nada de Cervantes ni de Galdós, pero se acordarán muy bien de los cuentos narrados por transexuales disfrazados de sota de bastos con aspecto satánico". PutoMikel, quien es conocido por su enfoque crítico y su labor divulgativa, no tardó en responder a esta provocación.

En declaraciones a la prensa, el divulgador sostuvo que "no cree que sea un señalamiento personal". Según él, esta es una estrategia colectiva en la que se busca atacar a un grupo en lugar de a un individuo. "Si los ataques son contra colectivos, las defensas también deben ser colectivas", afirmó. Las intervenciones de Vox, según Mikel, buscan crear un efecto mediático que inflame a personas con mentalidades retrógradas ante el travestismo, algo que ya cuenta con antecedentes históricos en España.

PutoMikel también se refirió a lo que considera un método retórico observado en la política de Vox. Describió que se lanzan múltiples acusaciones con el objetivo de determinar cuáles calarán en la opinión pública, un fenómeno que comparó directamente con las prácticas de Donald Trump. "Uno de los puntos retóricos que usan es asociar al colectivo LGTBI con un peligro para la infancia; esto es una práctica copiada de Estados Unidos, donde ha dado lugar a leyes antidrag en varios estados". Para él, este tipo de retórica es un intento de demonizar a la comunidad LGTBI, especialmente en relación con la infancia, un enfoque que considera muy peligroso y visceral.

Mikel hizo hincapié en la importancia de la educación inclusiva y la representación de la historia del colectivo LGTBIQ+ en las aulas. En su libro Sodomitas, vagas y maleantes. Historia de la España desviada de Atapuerca a Chueca, publicado en mayo por la editorial  Planeta, Mikel se embarca en una profunda exploración de la historia LGTBI en España, mucho antes de que existieran las siglas actuales. "La historia es una asignatura obligatoria desde finales del siglo XIX porque parte de la formación del espíritu nacional es enseñar que tenemos una historia común. Sin embargo, esto a menudo peca de sesgos", reflexionó en una entrevista durante el festival Memefest de Barcelona, donde habló sobre la necesidad de una historia más inclusiva.